Dicen que "Salvame" es el programa que acumula más denuncias del panora televisivo español, aunque a nadie se le escapa que se encuentra entre los preferidos por las audiencias de todas las edades, y que ha cambiado completamente la manera de ver y hacer televisión en España.
Es cierto que, como opinan muchos críticos, tenemos la televisión que nos merecemos y que nuestra programación es la más vulgar y cutre de toda Europa. Pero, por qué la aparición de las cadenas privadas no mejoró la oferta televisiva, sino que la empeoro notablemente?
Todas estas preguntas hacen referencia a un fenómeno único que nos invade desde hace casi dos decadas, la "telebasura", y del que "Salvame" es, precisamente, el paradigma. En esta forma de hacer televisión priman instintos tan bajos como el morbo, el sensacionalismo, la sensibileria, y el escándalo puro y duro. Es la ideología del todo vale por la audiéncia.
Así, los mensajes que se generan en todos estos programas no solo son frívolos e intrascendentes sino que, además, crean estilos de vida y gustos estéticos copiados de los personajes que los habitan, una fauna variopinta que se hace rica y famosa sin el mínimo esfuerzo, solo por vender las partes más oscuras de sus vidas.
Pero, a quienes podemos señalar como responsables de todo esto: a los productores, solo preocupados por los índices de audiéncia; a los telespectadores poco o nada selectivos y con un nivel cultural bastante bajo; o a los poderes públicos, cuya reacción definitiva todavía está por llegar?
A estas alturas de la película la pregunta del millón sigue siendo: se puede poner freno a este desenfreno, o el fenómeno de la "telebasura" todavía puede empeorar?
... societat de consum...
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